sábado, 28 de marzo de 2015

La inspiración.

Pozo de agotadas aguas,
hondo, en mi pena,
hondo, en mi alma.
Invisible a veces,
cómo un fantasma.

Sorprendente,
cómo el Guadiana,
que se esconde,
aparece, descansa,
se desborda,
se derrama,
y muere navegable y lejano
en la mar salada.

Cómo una novia,
que en una misma semana,
me deja y me desdeja,
me ama y me desama.

Cómo las espumosas olas
de la mar brava,
que golpean, se retraen,
y golpean en la roca cortada,
por el tiempo y por la mar,
que impenitentemente brama,
contra los cantiles
y las arenosas playas.

Cómo el sol en invierno.
Cómo la niebla tras el alba.
Cómo la bondad en la Tierra.
Cómo los rescolodos y las brasas...

sábado, 21 de marzo de 2015

La pequeña flor de marzo.

La pequeña flor de marzo,
asomó la primera
sus pétalos tempranos,
al rigor y al capricho
del clima castellano,
sol, cielo azul,
horizontes planos.
Sol, frío relente,
viento norte y nevado.

La pequeña flor de marzo,
decidió morir joven,
dejando como legado
un bonito cadáver,
un tallo delicado,
hermosos pétalos blancos,
que deslumbraban los días
en que el invierno fue manso,
y el viento del sur reinaba
invadiendo los páramos,
y anunciaba buenas nuevas
de calores tempranos.

La pequeña flor de marzo,
murió de noche,
cuando el invierno mostraba sus últimos trazos.
Murió feliz,
bella, con su delicado tallo.
Bella;
con sus pétalos blancos,
viviendo su primavera
por adelantado.

sábado, 14 de marzo de 2015

Marzo

De almendro en flor perfumado,
el invierno fenece a plazos,
brisa suave, paseo bajo los castaños.
Mi mente, tozuda, me fuerza a volver sobre mis pasos,
volver la vista atrás, hacia mi pueblo blanco,
mi cielo azul, mi infancia, mi pozo, mi patio,
mi árbol.
Brisa, cantar de los chopos,  palmas de los álamos,
verdor del trigo en los sembrados.
Melancolía en los idus, amor calmado.
Alba fresca, calor suave y plácido.
Manto verde en los campos,
la primavera sale de su capazo.
Marzo; el primer mes bello del año...

jueves, 5 de marzo de 2015

Los pájaros

La tarde;
cielo azul bordado de gris y blanco,
y en ese cielo;
unos pájaros, volando,
quizá desde el sur,
moreno y blanco,
hacia la primavera de un norte lejano.
Yo paseo en la tarde,
ufano,
dejandome llevar,
pensando,
en la libertad que representan unos pájaros,
por encima de la ciudad,
avanzando,
libres, gráciles,
gallardos,
en busca del norte templado,
en busca de su primavera,
cómo cada año.
Sí, la libertad bien puede ser esos pájaros,
libres, que,
sin apenas pensarlo,
suben cada año,
y miran desde el cielo,
a los que desde la ciudad
miramos,
con envidia al cielo,
como cada año,
viendo a los pájaros,
libres, hacia la primavera viajando.

La tarde se muere,
noche se va echando.
En la noche del cielo,
ya no hay pájaros,
libres,
volando.
Hay luna, estrellas,
sueños callados,
y en el recuerdo,
los pájaros de la tarde, volando.
hacia la primavera de un norte
lejano...